«No escupas para arriba porque te puede caer encima» dice una frase muy popular en Argentina. La cual generalmente moja a muchos políticos de nuestro país, debido a que muchas veces señalan con el dedo a colegas y terminan siendo protagonistas de situaciones muy similares. Sí, la coyuntura o las campañas electorales los «obligan» a marcar cuestiones que ellos mismos no pueden sostener en el tiempo.
CAMPAGNOLI DE CAMPAÑA EN PILAR.
Uno de los ejemplos es la actual Diputada Nacional y candidata a renovar su banca, Marcela Campagnoli. Quien hace un par de años presentó el proyecto de «Ficha Limpia» para impedir que personas con antecedentes penales no puedan integrar listas en los actos eleccionarios. Lo que nunca pensó la representante de Elisa Carrió que esa mancha iba a salpicar a su propia familia.
Hay que recordar que solamente hace un par de semanas la Cámara Federal de San Martín confirmó el procesamiento de Guillermo Iglesias, ex Secretario de Obras Públicas local y marido de Campagnoli, en las presuntas causas de corrupción que perjudicaron a los vecinos del distrito durante la gestión de Nicolás Ducoté.
GUILLERMO IGLESIAS PROCESADO JUNTO A NICOLÁS DUCOTÉ Y OTROS EX FUNCIONARIOS DE PILAR.
A Iglesias lo vinculan en las causas de la planta depuradora «Fantasma» del barrio Peruzzotti, aquella que la Comuna pagó $15.000.000 y nunca fue colocada para una mejor vida de los vecinos de la zona. Además también está procesado por la causa del programa Hábitat del barrio Monterrey en Presidente Derqui, donde la Comuna pagó $87.000.000 por obras que jamás se hicieron.
Campagnoli reclama por una ficha limpia que no tiene en su propio hogar. «En casa de herrero, cuchillo de palo» también podría ser otra frase que describa la realidad de la Diputada Nacional que deberá bajar su dedo a la hora de señalar o en todo caso tendrá que dirigirlo puertas hacia dentro porque sus fichas tampoco están limpias.
