Municipal, tu voto no sirve

«De 5000 empleados tengo muchísimos que son delincuentes», a esos que tantas veces culpó por su mala gestión municipal, por su falta de respuestas ante los pedidos de los vecinos, por la casi inexistente obra pública con fondos propios o por el incumplimiento de diferentes compromisos con los barrios privados. Nicolás Ducoté quiere hacer uso del trabajador municipal para intentar ganar su primera disputa electoral desde que es intendente. ¿Democráticamente? ¿Ofreciéndoles ser voluntarios? La realidad supera a la ficción, busca arrearlos como ganado. ¿Pero eso no lo hacía el peronismo? ¿El Cambio no iba a modificar esos manejos?

Dependiendo de las formas de educación que hayan recibido los distintos directores que hoy tiene la comuna, los municipales han recibido la «propuesta»/orden para ser «voluntarios» el próximo domingo. Quienes tienen más años en la Comuna, y mucho más para ganar que perder, se negaron y de esa manera le anticiparon que sus votos no precisamente apoyarán a Cambiemos. Sin embargo, aquellos que son más jóvenes y entienden que deben tratar de cuidar su fuente laboral, y sostén de sus familias, se vieron obligados a aceptar.

Hay un sector que puso su dignidad por delante de cualquier consecuencia que puedan sufrir. A ellos comenzaron a hacerles sentir el rigor de la «democracia macrista», rotándolos de área de manera constante hasta cansarlos. Sumado a eso, los funcionarios aprovecharon para cubrir esas vacantes forzadas para ingresar a sus futuros fiscales como trabajadores municipales.

“Nombré 170 empleados sobre 5000, hay 4830 que no los nombré yo, muchos son corruptos”, había asegurado Ducoté en junio del año pasado. Hoy esos números son diferentes, hubo una catarata de nombramientos y la planta municipal ya se acerca a los 6.000 empleados. Con esa cantidad convertidos en «voluntarios», tranquilamente puede asegurarse una sólida fiscalización en las PASO y con el agregado que puede asignar a cada municipal estar en la mesa en la cual vota, o en su defecto en la misma escuela. No obstante, al reconocer el enojo de los trabajadores con el trato que reciben diariamente, el jefe comunal y su equipo de campaña decidió impedir esos votos en contra.

Muchos de los fiscales «voluntarios» de Cambiemos estarán en escuelas en las cuales no podrán votar y ante la pregunta si pueden dejar la mesa para ir a donde les corresponde emitir su sufragio, la respuesta fue: «NO». Con esa modalidad, Ducoté y sus asesores esperan evitar miles de votos en contra de sus propios trabajadores.

Delincuentes, corruptos (parece que hay un fallo que dice que Ducoté mintió), culpables, pero al final son la herramienta necesaria para esta contienda electoral. «No queremos tu voto, sólo fiscaliza», es el mensaje de la Revolución.