Entre septiembre y octubre pasado, los representantes de Nicolás Ducoté en el Concejo Deliberante brillaron por sus ausencias a la hora de debatir algo tan sensible como la Emergencia Alimentaria. Si, tomaron como una estrategia electoral evadir la discusión de las necesidades básicas de los vecinos más postergados. Ayer siendo oposición y responsables de la coyuntura por la cual atraviesa el estado municipal, la decisión fue la misma. No presentarse.
Con los concejales propios, más la presencia de Miguel Gamboa, el Frente de Todos logró aprobar el proyecto de Emergencia enviado por el Ejecutivo, el cual según argumentó que era necesaria «debido al estado crítico en materia Social, Sanitaria, de Seguridad, Productiva, Presupuestaria, Administrativa, Financiera y de Servicios Públicos». «Nuestra agenda de prioridades está puesta en atender el hambre, la pobreza, la inseguridad y la falta de acceso a la Salud que sufren los pilarenses. Se trata de derechos fundamentales que como estado no podemos poner en riesgo», aseguró el Intendente Federico Achával.
Increíblemente fue el propio gobierno provincial de María Eugenia Vidal el que intimó a la gestión de Nicolás Ducoté por haber infringido la ley de Responsabilidad Fiscal. En ese caso le indicaron que se excedieron en la contratación de agentes municipales, desde el 2017 al 2019 podrían haber incorporado alrededor de 120 y no casi 800 como lo hicieron. Con estos datos igualmente, Ducoté dio la orden a sus concejales de no asistir al recinto para defender lo realizado en sus cuatro años de gobierno. Osea el desequilibrio administrativo y económico en el estado local.
Sin declaraciones públicas, pero si con expresiones en redes sociales escondidas detrás de distintas agrupaciones políticas, los ducotistas se mostraron preocupados por la desaparición de su estructura política bancada por el municipio. En contraste a esa posición, la concejal del Frente de Todos, Lourdes Filgueira expresó: «Es una Emergencia que que empieza por el hambre, sigue por el desempleo y continúa por la imposibilidad de pagar las tarifas o acceder a los medicamentos».
Así están marcadas las prioridades de un lado y del otro en el Concejo Deliberante, del nuevo oficialismo y de una oposición sin autocrítica. Aquellos que siguen detrás de la imagen de Ducoté decidieron hacer oídos sordos a las principales necesidades del distrito (como cuando fueron gobierno) y pelear simplemente por sus puestos políticos. Por su parte el Frente de Todos avanza en los pedidos básicos que les solicitan los vecinos. Aquellos que fueron olvidados en «La Revolución».
