Poco compañero

04/05/2016 | El intendente Nicolás Ducoté disfruta de las interna de los gremios locales y no cumple con ninguno de los puntos que le habían solicitado. Se muestra indiferente en los temas que refieren a la fuente laboral.

Con fecha del 21 de marzo de este año, una veintena de gremios se agruparon para solicitarle al Intendente Nicolás Ducoté siete puntos que ellos consideran «necesidades del Movimiento Obrero Pilarense» y que con «carácter de urgencia, deben ser tratados y deberían estar a cargo de dirigentes gremiales». A pesar de lo expresado, para el jefe comunal nunca los tuvo como prioridad y para retrasarlo decidió involucrar a aquellos sindicatos que habían quedado al margen, por diferentes motivos, para solito meterse en el medio y utilizar esa posición como escusa para no entregarle nada a nadie.

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Así Ducoté ya decidió, salvo un cambio rotundo, que ni la Delegación Regional Pilar del Ministerio de Trabajo de la Provincia de Buenos Aires, la Dirección Gremial, el cumplimiento de la ordenanza municipal que implica que el 80% de los trabajadores deben ser pilarenses, el 33% de la lista legislativa debe estar destinada para el Movimiento Obrero, la participación en la Dirección de Capacitación y asuntos laborales, la oficina del Ministerio de Trabajo de Nación ubicada en Zárate o la llegada de una sede del Banco Hipotecario involucrará a los sindicalistas que recibió en su despacho.

Fue él mismo quien decidió que tanto el Sindicato de Trabajadores Municipales de Pilar, la UOCRA, Ferroviarios, entre otros salgan a romper la propuesta que lidera Gustavo el Canario González. Este último junto al resto decidieron poner al camionero Oscar Larramendi para ocupar el cargo de delegado en el Ministerio de Trabajo de la Provincia de Buenos Aires. «Larramendi es un tipo ambicioso, lo único que le importa es que esté él» aseguró el bancario Daniel García, casualidad o no fue el mismo que lo mocionó en uno de los primeros plenarios que se realizaron en el camping del Sindicato de Empleados de Comercio y luego decidió cruzarse de vereda.

Ducoté se mostró en contra de la ordenanza recientemente sancionada por el Concejo Deliberante para que no haya despidos injustificados en la planta municipal y decidió decirles no a cada uno de los pedidos que les realizaron los gremios que obedecieron todos los pasos que él solicitó. Demostró una vez más ser poco compañero.

 

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