“Nosotros respondemos al gobierno de turno”, fue la frase elegida por José “Tano” Barreda para adelantar lo que se venía en Deportivo Villa Rosa a la hora de la renovación de autoridades. Esa posición le posibilitó excluir a todos aquellos que no estén de acuerdo con su continuidad, más allá de los sentimientos por la institución. Y también lo obligó a incluir al propio Intendente Nicolás Ducoté entre los socios habilitados para ingresar a la Asamblea General. ¿Concurrió? No ¿Cumplía con el estatuto para poder votar? Tampoco.
Lo sucedido el jueves 2 es el más claro ejemplo de la consecuencia que puede tener una persona cuando queda esclavo de sus palabras. Barreda debió enfrentar un debate más caliente en la puerta del club que en el interior del mismo, debido a que con la “custodia municipal” que le armó Delfina Lenzi con su Dirección de Relaciones Institucionales quienes buscaban discutir el camino a seguir se quedaron afuera. Esos le reprocharon muchas situaciones al Presidente, una de ellas haber incluido a Nicolás Ducoté para votar.
“El pelado Ducoté tiene 6 meses boludo, 6 meses tiene de antigüedad ¿y ya puede votar?”, le achacaron a Barreda. Quien buscó hacerse el desentendido y sólo preguntó: “¿Quién?”. La respuesta fue clara: “El gato que te banca a vos. Seis meses tiene y ya está en la lista”.
Ese grupo de hinchas, socios y ex socios, que incluye entre otros al histórico entrenador Antonio “Chileno” Flores, no se dan por vencidos y buscan impugnar el acto del pasado jueves.
Si se repite la renovación de autoridades, ¿irá Ducoté a votar? ¿Se acordará que es socio de Deportivo Villa Rosa? ¿Barrera lo volverá a incluir?