Todos los argentinos miramos con nostalgia la final del mundo de Brasil 2014 y todavía tenemos la sensación de que fue ayer, pero ya pasaron casi tres años y Rusia 2018 está más cerca que de aquella derrota con Alemania. Para José Molina y los que lo acompañaron en el 2015 transcurrió poco tiempo de la caída en las PASO ante Humberto Zúccaro, y posteriormente con Nicolás Ducoté. Pero las decisiones del sciolista de cara a una nueva candidatura marcan que cambió y mucho. ¿Habrá sido aquel té que compartió con el actual Intendente en el Sheraton?
Cacique en su tierra en las últimas décadas, Molina hoy demuestra tener algunos inconvenientes con la conducción de su tribu. Increíblemente, más de uno que lo acompañaba decidió alejarse de su entorno. Primero fue Darío Pascual, algunas cuestiones personales fueron el principal motivo pero el mal manejo del ex Senador Provincial es lo que marcó el ex consejero escolar para irse de su lugar de siempre. Inclusive, esa ida generó la incógnita si fue un acuerdo entre Molina y Nicolás Ducoté, debido a que fue Gustavo Trindade quien acobijó al desertor.
«Lo mejor está por venir» era el slogan utilizado en el 2015 por Molina, por aquel entonces cada aparición pública generaban nuevas críticas hacia la gestión de Humberto Zúccaro. En cada oportunidad que pisaba el centro de Pilar hacia referencia a la inseguridad, responsabilizaba al por entonces Comisario Fernando Márquez, titular de la comisaría Pilar Primera; y a quien lo respaldaba, el Secretario de Seguridad municipal, Juan Carlos Losada. Hoy, el derquino camina con Zúccaro a su lado y colocó al ex funcionario como tercer pre candidato a concejal en la lista que encabeza. Al final, ¿Zúccaro no era tan malo? ¿Y Losada era Dick Tracy?
Al igual que el ex intendente, uno de los caballitos de batalla del ex Director Ejecutivo de la OPDS era su lugar de residencia. «A mi me encuentran en Derqui, yo vivo en Derqui», repitió infinidad de veces. Sin embargo, en el final de su carrera política prefirió encerrarse entre los muros de un country. Sumado a eso, construyó un sanatorio médico privado en su antiguo hogar frente a la plaza Antonio Toro. Pero ¿no era un defensor de la salud pública? Si claro, para aquellos que no puedan pagar la consulta en su nuevo emprendimiento.
Su última decisión política le costó caro. Eligió a Zúccaro por encima de cualquier acuerdo con La Cámpora. En el 2015 apostó a la unidad con la agrupación kirchnerista más cercana a la Presidenta Cristina Fernández de Kirchner y Lucía Portos lo respaldó públicamente. En este 2017 se quedó con el ex Jefe Comunal, por eso la Diputada Provincial se alejó y con ella se fueron Eva Molina (hija de José), Damián Espíndola (yerno de José), el concejal Juan Pablo Roldán, entre otros.
«Yo la boleta no te la reparto», le aseguró la actual concejal Marcela González, quien también decidió dar el portazo tras el ofrecimiento de colocarla como primera pre candidata a consejera escolar. Molina se inclinó por la docente Marcia González para incluirla como segunda en la lista de pre candidatos a concejales. Una histórica menos de cara a una interna durísma en Unidad Ciudadana.
Zúccaro y Molina fueron los elegidos por el pueblo durante la década kirchnerista en Pilar, etapa terminada con la victoria ante ambos de Nicolás Ducoté. Con varios soldados menos para la batalla que se avecina, ¿el derquino podrá plantear una pelea digna? ¿O al alejarse, sus ex compañeros le están marcando el camino de salida?
Un verdadero trotador de la política, no debería abrazarse a un muerto político, destructor del peronismo en Pilar, saltarin y no confiable para la militancia, la agrupación Mesa de diálogo del PP,tambien se apartó por esta razón y la venta del paquete pilarense al Grupo empresario Achával-Cristóbal Lopez,..tus viejas estructuras fueron las mejores José.