En el inicio de su gestión, Nicolás Ducoté quiso lidiar el conflicto de intereses de los distintos sectores gremiales del distrito asegurándoles el oro y el moro a cada uno de ellos. Con eso aguantó la situación hasta que se vio acorralado y tuvo que crear dos áreas nuevas dentro de su gobierno para contenerlos. Así nacieron la Dirección Gremial y la última destinada a las inspecciones de Seguridad e Higiene. La primera está funcionando en piloto automático mientras estén los fondos; en cambio la segunda, parece ser la más rebelde. Por ello, ayer recibió una catarata de renuncias ante la inactividad de la misma. Como dice la publicidad de la tarjeta de crédito, “hay cosas que el dinero no puede comprar”.
Cuando Sergio González del Sindicato de Químicos de Pilar, Cecilar Aguilar de UTHGRA, entre otros, fueron convocados a ser parte del municipio les manifestaron que iban a tener a su cargo todo lo referido a las inspecciones de Seguridad e Higiene que se realicen en el distrito. Pero ese compromiso no fue respetado y los dirigentes le marcaron la cancha al Intendente.
Uno de los apuntados por esta situación es Diego Ranieli, quien desde hace algunos días es el “Gran Inspector” teniendo bajo su área a todos los inspectores municipales. Y este habría dado la directiva que realicen distintas visitas a empresas del parque, sin diálogo alguno con los sindicalistas designados para esa tarea.
González en su rol de Director y el resto de los asesores le dijeron a Ducoté que renunciaban, que así no iban a trabajar. La decisión también sorprendió a propios, como lo son Gustavo González y Jorge Herrera, los dirigentes gremiales más cercanos al gobierno.
En principio, se resolvió una especie de tregua. Pero la cuerda está demasiada tensa para el momento político que se aproxima para Nicolás Ducoté y la gestión de Cambiemos en Pilar.