Fue en los primeros seis meses de gestión cuando se conocieron los antecedentes del Subsecretario de Ingresos Municipales, Juan Carlos Mairano, que lo habrían involucrado en un caso de corrupción. Acusado en su distrito, Hurlingham, por malversación de fondos llegó a Pilar gracias a la decisión de Nicolás Ducoté. Su currículum se ajustó a las características necesarias para ocupar el rol de recaudador del egresado de Harvard. Hoy el foráneo es el apuntado como el nexo entre los empresarios «chinos» y el municipio.
«Mairano sabe que el Tano molesta. Yo le conozco hasta el calzoncillo agujereado de Mairano. Y Mairano me presiona y me extorsiona, la única forma que no me presione y no me extorsione resuelvo estos dos temas y me voy. O resuelvo estos temas y armo un quilombo. Porque si lo armo ahora…Xidi me está pidiendo por favor que no arme despelote» (AUDIO), relató quien supuestamente representa a los propietarios de los supermercados chinos. Uno de estos últimos, que prefirió mantener resguardada su identidad, aseguró que el funcionario y el «gestor chino» se conocen por haber mantenido negociaciones en Hurlingham.
Ducoté avaló cada impuestazo propuesto por Mairano y también este tipo de acuerdos que serian turbios. Buscó un acusado de corrupción para darle el cargo para que lo mismo pueda ocurrir en Pilar. Pilar Político, a través de fragmentos de una charla que tiene como protagonista principal a una persona que ingresa al palacio municipal habitualmente y describe como se manejaría el elegido por el líder de la «Revolución», te muestra que la Transparencia fue simplemente una promesa de campaña. Una entre tantas otras.