Desde el final del 2016, aquellos que viven en Villa Rosa, puntualmente en el límite con Matheu, vieron su paz alterada por la política «energética» de Nicolás Ducoté. La misma que estuvo por encima de cualquier reclamo vecinal. Araucaria Energy con su central termoeléctrica perturbó y contaminó hasta hoy cuando fue clausurada.
Hubo reiteradas inspecciones desde principio de año, en operativos en conjunto de la Municipalidad de Pilar, la autoridad del agua de la Provincia (ADA) y la OPDS con la participación de los mismos vecinos que permitieron el ingreso a sus hogares para medir el impacto acústico de las industrias. Aseguraron que las mediciones se realizaron con el mayor rigor técnico y de acuerdo con las normativas vigentes.
Ducoté no sólo habilitó a Araucaria Energy sino que defendió a la empresa en distintos ámbitos. Incluso discutió con vecinos de barrios cerrados aledaños al predio y ninguneó el reclamo. «No son muchos, no reunieron ni 70 personas» minimizó el conflicto en más de una ocasión. Así dejó de lado la preservación del medio ambiente del territorio, poniendo por delante sus relaciones con la firma involucrada.
“No son muchos, no reunieron ni 70 personas”
«Estas plantas tienen algunas de las máquinas más modernas del mundo, son Siemens. Son las mismas que están en Alemania y Londres», manifestaba Ducoté para promocionar el trabajo de la central termoeléctrica de Araucaria Energy en 2017. Siempre tuvo palabras de elogios para la empresa que alteró la vida cotidiana de los pilarenses.
Ahora el estado local y provincial tomaron nota, escucharon a los damnificados y terminaron con ese sufrimiento auditivo y antinatural. Algo que nunca ocurrió entre el 2016 y 2019 cuando Nicolás Ducoté prometió no tener más cortes de luz con la llegada de Araucaria, pero no sólo no cumplió sino que se convirtió en persona no grata para cada uno de los barrios afectados.
✊🏽👏👏👏👏 vecinos y Organizaciones ambientales UNIDOS, a seguir trabajando por Pilar, ahora a continuar con la justicia ambiental en el conflicto de Parada el Gallo, zona declarada en Emergencia Ambiental en 2016 y a terminar con el ilegal e irregular COT (código de ordenamiento territorial) avalado, en tiempo récord, por la ex gobernadora Vidal.
El actual gobierno lleva clausurando a Araucaria y a VERASUR en lo que va de la pandemia. Conflictos ambientales de larga data y luchas desiguales plagadas de corrupción e ilegalidad.
Araucaria, negociado relacionado directamente con el ex presidente. Verasur, algo mas difícil de dilucidar pero ligado al maldesarrollo de la explotación no convencional de hidrocarburos, extractivismo.
Ojalá y siga sorprendiendo me con medidas como estas, ojalá y de una vez luego de tanto tiempo, estas acciones desde el municipio, nos traigan la tan anciana JUSTICIA AMBIENTAL.