Mientras a través de las redes sociales se aplaudía el trabajo diario de los médicos, quienes verdaderamente están en la primera línea de fuego en esta guerra contra el coronavirus, los anticuarentena nuevamente estaban haciendo todo lo posible para desestabilizar los sistemas de salud. Seguramente la «libertad» de ellos era mucho más importante que la vida de otros habitantes de este país.

En Pilar, Ciudad de Buenos Aires o donde hubo rastros de la marcha existieron mensajes que sorprendieron e increíblemente muchos de ellos hacían referencia a la muerte. Sin dudas, la horca instalada en Capital Federal con la frase «Libertad o muerte» sacudió cualquier expectativa que se tenía sobre el pedido que se quería difundir.

Lamentablemente hubo otras muestras de odio que tomaban a la muerte como una «solución» a la «falta de libertad» de los anticuarentena. La imagen del muchacho con el cartel que decía: «Fase 1 Fusilar políticos, Fase 2 Fusilar periodistas, Fase 3 Argentina potencia», recorrió las redes sociales. En medio de la pandemia que se ha llevado cientos de miles de vidas en todo el mundo, los anticuarentena basaron sus pedidos en más muertes. Increíble pero real.

Al igual que en cualquier guerra, en esta lucha diaria contra el COVID-19 la vida se convirtió más que nunca en lo más preciado. Sin embargo, el odio de muchos quiere hacernos creer que la muerte es la salida en esta pelea. «Que se mueran rápido los que se tengan que morir, así se termina esto» ¿a eso se referían cuando escribieron Libertad o Muerte? ¿De esa manera obtendrían lo que buscan?