Tanto la Directora de Obras Particulares, Florencia Corrales, como el titular de Planeamiento, Juan Pablo Caputo, son dos funcionarios foráneos que se han caracterizado por las irregularidades en los trámites de los emprendimientos inmobiliarios del distrito. Si sos amigo pueden condonarte deudas millonarias o eximirte de pagar las tasas correspondientes. En cambio, si nadie te conoce no sólo exigen todos los requisitos, sino también algo más y con maltratos. Uno de los casos es el proyecto «Meridiano».
A los desarrolladores de «Meridiano» les exigieron todo lo necesario para la aprobación de sus planos. Por ello lograron el sello para construir: un complejo de tres edificios, dos subsuelos de cocheras, planta baja más cuatro pisos, locales y oficinas desde 45m2, en un terreno de 13.000m2. Todo lo mencionado logró la aprobación pero ahora desde la gestión de Ducoté buscan tirar para atrás lo firmado.
Todo el conflicto apunta a un mal desenvolvimiento de Corrales en su función. Según las normativas vigentes, desde «Meridiano» debían presentar la aprobación de pasos urbanísticos. Ella por error (¿?) no calculó los impuestos equivalentes a 1359m2 de tierra sobre la autopista Panamericana. Según fuentes municipales, quien llegó de la mano de Jesús Cariglino se «olvidó» de exigir el certificado de prefactibilidad y de liquidar diferentes aranceles que superán al medio millón de dólares. ¿Un descuido lo puede tener cualquiera?
Funcionarios y trabajadores municipales le marcaron a Pilar Político las diversas particulares de Florencia Corrales dentro de su oficina. Fue sorprendida revisando los cajones de los profesionales de su área, a los cuales amenaza constantemente con echarlos si descubre que tienen otro trabajo fuera del horario municipal; aunque ella comercializa pulseras y alajas en el mostrador donde atiende a los gestores. Igual que los africanos que persigue la policía en la vía pública pero con los «fueros» de Ducoté.
Para remendar el error, ahora Corrales y Caputo intimaron a los desarrolladores de «Meridiano» a paralizar su obra, en la cual decenas de trabajadores perderían su fuente laboral. Un error más, uno de muchísimos, de parte de la Directora de Obras Particulares a quien varios empleados se le alejaron solicitando licencia psiquiátrica debido a los malos tratos recibidos. ¿Cuándo será su turno?