Carlitos volvió a China

21/03/2018 | Carlos Arena formó una sociedad con el ex Intendente procesado de San Martín, Pablo Landolfi, y la actual concejal massista Claudia Juanes para la llegada de más supermercados chinos al distrito. La edil es la esposa del puntero del Diputado Jorge D'Onofrio y es la contadora de la mayoría de los capitalistas asiáticos del distrito.

Fue poco entendible la decisión de Carlitos Tevez de irse a jugar a China en su mejor momento del primer regreso a Boca. Los millones lo tentaron y fue hasta el otro extremo del mapa a pasar un año sabático. El dinero de los asiáticos parece conquistar al que se le ponga enfrente o atraer a aquellos que tienen una debilidad por el vil metal. Es el caso del actual Secretario de Gobierno de Pilar, Carlos Arena. Quien apenas asumió buscó generar el contacto con los empresarios de los supermercados que están invadiendo el distrito. Y lo logró a través de sus compadres/socios. Sí, Carlitos volvió a China.

 

Cuando el ex Senador Jorge D’Onofrio conformó a dedo la lista de 1País en el 2017 y colocó a Claudia Juanes por encima del resto de los candidatos, su equipo de Prensa tuvo que enviar una reseña para explicar quien era esa persona que había relegado a los dirigentes más reconocidos del Frente Renovador. En esa historia personal que se intentó difundir omitieron que es la esposa del ex Intendente procesado de San Martín, Pablo Landolfi, y que en su estudio contable sus principales clientes son los tan deseados chinos.

 

Como le sucedió a Tevez, muchos en Pilar sueñan con hacer negocios con los capitales chinos que se han radicado en el distrito. De todos esos, Arena es el que tiene los elementos necesarios para hacerlo. Su rol de funcionario público más la triangulación con Landolfi y Juanes le da una ventaja apreciable por encima del resto. Lo convierte en el hombre que los asiáticos deben ver para seguir aplastando al comercio local y él con gusto los recibe.

La cara de D’Onofrio en Pilar

La construcción de su nueva casa en uno de los countries más exclusivos del partido a pocos metros de la Panamericana o la camioneta Chevrolet de medio millón de pesos con la cual su esposa Natalia Campero recorre el territorio como jefa de municipales, son tan sólo pequeñas muestras que a Carlos Arena los números chinos le encantan. Pero tiene un problema, Diego Ranieli. ¿Podrá resolverlo? ¿O la próxima torta de cumpleaños deberá dividirla en una porción más? Para no parecer tan goloso.

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