Posteriormente a la catastrófica derrota electoral en el 2019, María Eugenia Vidal decidió abandonar la provincia de Buenos Aires y toda la escenografía mediática que había armado mientras era la Gobernadora. Con el sueldo de funcionaria logró mudarse al coqueto barrio La Isla en Recoleta y así se alejó definitivamente de los pobres a los cuales utilizó para sacarles sus datos personales en el 2017 y fotografió en busca de su reelección en el 2019.
MARÍA EUGENIA VIDAL EN EL CENTRO DE LA MESA EN EL COMEDOR COMUNITARIO DE SAN CAYETANO, LUIS LAGOMARSINO.
Tratando de relanzar su carrera política en el último año optó nuevamente por la Capital Federal en lugar del territorio bonaerense, sí, la leona se inclinó por el cemento de la ciudad. Por ello, ayer se tomó como una verdadera sorpresa su aparición en un comedor comunitario ubicado en el barrio San Cayetano en la localidad de Luis Lagomarsino.¿Reinició su campaña para Gobernadora?
Con cara acongojada y la misma actuación que se le conoció entre el 2015 y 2019, Vidal se mostró en un ámbito muy humilde de nuestro distrito. Una escena ya conocida por todos los bonaerenses, integrante de una película de terror que llevó al distrito, la provincia y el país a una crisis sin antecedentes. Y puntualmente a Pilar a declarar por primera vez en su historia la Emergencia Alimentaria. Otra vez la leona salió a la caza de pobres.
Nadie la invitó y se coló en la foto
Ayer los dueños de casa esperaban a María Eugenia Vidal con su grupo de asesores, pero nadie tenía en la lista a la concejal Adriana Cáceres y su fotógrafo Fabián Martínez. Inclusive el referente barrial que lleva adelante el comedor dudo en abrirle las puertas. Sin embargo, de manera muy hábil la ex Diputada ingresó y se colocó de manera estratégica para la foto del encuentro.
ADRIANA CÁCERES SE COLÓ EN LA FOTO DE VIDAL EN LAGOMARSINO.
