No se quedaron de brazos cruzados antes y continúan con la misma postura, son los vecinos de Los Cachorros quienes buscan que respeten sus derechos. El pedido sigue siendo por mejoras en el sistema de salud municipal y puntualmente en el CAP de su zona. Ellos lograron obtener los recursos para la ampliación de la dependencia a través del Presupuesto Participativo, pero el mismo gobierno que los invitó a participar de ese programa es el que les está diciendo que no van a cumplir.
En octubre del año 2016 fueron parte de la votación de Presupuesto Participativo y ganaron. La suma de $1.800.000 tiene que ser destinada para agrandar la salita y así agregar más especialidades para aquellos que se atienden allí. Los principales opositores a esa construcción son los titulares de Salud, quienes en la carta de viabilización aseguraron no estar en contra, pero anticiparon que no cuentan con recursos para enviar más profesionales al barrio. Esa negativa es la que impide que el proceso licitatorio comience.
Sumado a eso, el country Highland Park desde hace varios años funciona como una especie de padrino. Desde esa urbanización salieron los fondos del sillón odontológico que la actual Comuna descartó. Pero lejos de desentenderse del tema, los directivos del barrio cerrado redoblaron la apuesta, donando uno nuevo e inclusive propusieron hacerse cargo de la construcción del consultorio de esa especialidad. ¿La traba? Nuevamente el municipio.
Hasta el momento, las autoridades de Presupuesto Participativo, Gabriel Lagomarsino y Marcelo Guzmán han sido los únicos que pusieron la cara ante la ciudadanía de Cachorros y les admitieron la realidad de la situación. Por ello, los vecinos se cansaron y planean un escrache en la puerta del barrio privado donde vive el intendente Nicolás Ducoté. Todavía no comunicaron cuándo lo harán, pero aseguraron que será la forma de demostrar que se les terminó la paciencia.
